miércoles, 21 de julio de 2010

Sobre la psicosis

Que los poetas legislen con sus versos la vida de los hombres y que los psicoanalistas interpreten los mecanismos intrínsecos de dicha legislación no son, todavía, pruebas suficientes para que sigamos recluyendo a nuestros locos en los manicomios o sus sustitutos, no siempre diferenciados de la fuente de la cual provienen.

Una manera de pensar inhumana genera una manera de pensar humana y esto, sin embargo, no le da al asunto criterio de verdad. Porque debemos decirlo: no es en la verdad de la locura; donde anida la humanidad y, por tanto, no es, precisamente, humanidad lo que ambiciona el discurso psicótico sino, más bien, una palabra que por su brusquedad interrumpa el flujo de lo que teniendo que ser deseo, todavía, es necesidad en él.

Palabra que por su imposibilidad de ser reducida a cosa alguna (si ustedes quieren: falo, significante de falta) sirva como ejemplo (porque ¿de qué otra cosa se trata que de un proceso de identificación?) para que el habla del psicótico pueda, para dejar de ser psicótico: separar la cosa de la palabra que nombra la cosa o bien, en otro nivel, separar lo bueno de lo bello o bien, si se trata de hablar de los diferentes niveles de la locura, una palabra que le permita al hombre separar lo bello de lo divino.

Y si para semejante transformación habrá de ser necesario el cuerpo del psicoanalista, no nos pondremos a tratar de saber si es demoníaco o divino que el psicoanalista oficie de madre, pero diremos que la verificación del cuerpo no da más garantía al símbolo sino, por el contrario, pone en cuestión, precisamente, al símbolo porque el poder de curar está en el cuerpo. Porque si se tratase de curar, es de la eficacia simbólica de lo que se trataría y de ella, de la eficacia simbólica, es más capaz el cuerpo que la propia palabra.

Y si totalmente faltase el cuerpo no tendríamos, tampoco, el símbolo en su belleza pura o, mejor dicho, no habría símbolo posible en esa debilidad.

Esta manera de no poder no estar y, tampoco, poder estar, hace del cuerpo del psicoanalista una nube de polvo ardiente y helada a la vez que, en todos los casos, envuelve a quien por su boca habla, en esa pasión.

A nada temo, dice el sujeto, sólo a mis propias palabras.
Y sujeto, quiero estar diciéndolo, también está el loco. Ya que se trata de falta de significante, es decir, que forclusión significa que se trata de un sujeto como efecto del significante pero, singularmente, del significante que falta.

Lo que aparece desde el principio comprometido en la psicosis es la representación del sujeto por el significante. Ocurre una dispersión de los significantes que representan al sujeto. Porque no se trata de represión que permite que el otro significante funcione como referente de la representación del sujeto, sino del mecanismo de forclusión (rechazo) que se caracteriza por impedir la representación significante del sujeto.

Esta pequeña disgresión teórica es para permitirme decir que si el neurótico habita el lenguaje, el psicótico es habitado, po-seído por el lenguaje.
Esa luz que debería iluminarlo, lo ciega.

-Fragmento de Freud y Lacan 1, de Miguel Oscar Menassa-

martes, 20 de julio de 2010

El PSOE de Móstoles postula a Miguel Oscar Menassa a premio Nobel de Literatura

Móstoles, 20 jul (EFE).- El poeta Miguel Óscar Menassa bromeó en uno de sus libros con que ganaría el Premio Nobel de Literatura en veintiún años, y veintiún años después, la Asociación Internacional de Escritores y Artistas (IWA) situada en Estados Unidos, lo ha propuesto como candidato al Premio Nobel de Literatura 2010, iniciativa hoy apoyada por el PSOE de Móstoles.
Este bonaerense que se exilió a España hace 34 años- el mismo año que arrancó la dictadura argentina de Jorge Rafael Videla- es uno de los tres hispanos que este año opta a tan reconocido galardón, cuyo fallo se conocerá el próximo mes de noviembre.
A cuatro meses aún de conocer el veredicto más de 3.500 personas y 180 instituciones han mostrado el apoyo a su candidatura, entre los que figura el Grupo Socialista de Móstoles que hoy lo ha respaldado públicamente y que pretende sumar a la causa a otros grupos políticos y municipios madrileños.
Todo para contribuir a que el Nobel recaiga en este humanista del s.XXI, médico de carrera, psicoanalista, pintor, cineasta, y poeta, que ha publicado casi medio centenar de libros, 25 de ellos de poesía, "el patrón de todas las actividades", le gusta matizar.
Influido por más de 200 escritores entre los que figura Raúl González Tuñón, Vicente Aleixandre o Rafael Alberti, Menassa ha desarrollado una poesía en la que está presente el psicoanálisis y en la que "se ocupa de los indios, desclasados y las mujeres", a la vez que critica "todo lo criticable", explica él mismo a Efe.
"El poeta que no denuncia no es poeta, porque tiene obligación de denunciar, porque está todo sellado, y tiene que romper los sellos para que las palabras y las concepciones se liberen", puntualiza Menassa.
Para él la poesía actúa incluso como un anticipo de la realidad y es a su vez una forma de denunciar a las generaciones futuras cuál es el trato que se está recibiendo en el presente, asegura.
Este espíritu crítico y su condición de "cantor sin dueño" son a su juicio, lo que le hacen merecedor del Nobel de Literatura, a lo que se suma, tal y como indica, el hecho de que es el único poeta del s.XX que tiene discípulos, poetas que siguen su estela en la Escuela de Poesía Grupo Cero.
Las candidaturas a los premios Nobel de Literatura cuentan entre todos los aspirantes, con dos hispanos conocidos, el sacerdote nicaragüense Ernesto Cardenal y el también argentino Ernesto Sabato, que en opinión de Menassa, merecería más bien el de la Paz.
Por lo pronto, a la espera de que se conozca quién recibe el galardón, Menassa sueña con ese momento, en el que anuncia, se definirá como "poeta español" en vista de los apoyos recibidos. EFE

jueves, 8 de julio de 2010

La salud y el trabajo

LA SALUD Y EL TRABAJO



El pasado domingo día 4 de julio salía publicado un artículo en Diario Sur con el titular ¿El trabajo es salud? En primer lugar quisiera plantearme la conjunción de ambos términos. La Organización Mundial de la Salud define el término salud de la siguiente forma: Estado de completo bienestar físico, mental y social y no solamente la ausencia de enfermedad. Según esta definición, muy pocos estaríamos en un estado saludable. Podríamos darlos por satisfechos si conjugamos cierto nivel de bienestar físico, mental y social, y nos conformamos cuando falla alguno de ellos. Alcanzar esa completud es, para muchos, inimaginable en el mundo en que vivimos. 

Si buscamos la definición del concepto de trabajo encontramos en el diccionario de la Real Academia Española: Acción y efecto de trabajar. Ocupación retribuida. Obra, resultado de la actividad humana. Nada se dice del efecto sobre el que trabaja. Hay que reconocer que el concepto de trabajo no goza, hoy en día, de sus mejores momentos. Para unos porque les falta, para otros porque no tienen condiciones justas de trabajo, personas que trabajan hasta 14 horas al día por 900 euros y tienen que sentirse afortunadas por ello. Sin embargo, para no caer en las siempre efervescentes críticas, el concepto de trabajo entendido desde el punto de vista de la necesidad de la fuerza humana para transformar una materia, inclusive la propia persona, no tiene por qué significar injusticia e insatisfacción. 

Es el mercado laboral el que pervierte el concepto, son los empresarios los que no establecen condiciones justas para sus trabajadores, es la avaricia desmedida de un sistema que se olvida de la necesidad de cuidar al trabajador. Es cierto que antaño no existían las jornadas de trabajo, las personas trabajaban hasta caer exhaustas y eran sustituidas por otra persona hasta que corría la misma suerte. Ha habido importantes conquistas sociales, pero no podemos darnos por satisfechos. No vivimos en una sociedad justa. Aún hay quienes no encuentran trabajo porque los financieros fueron demasiado ambiciosos, quienes terminan su formación universitaria y no encuentran un mercado laboral que les reciba. Con estas circunstancias, parece difícil entender frase del poeta José Martí: La felicidad sólo puede hallarse en el camino del trabajo. 

Lejos de pensar una vida donde todos seamos iguales y todos ganemos lo mismo, más allá de la importancia de la valía del trabajador, de su formación, de su ambición, también hay que exigir al sistema productivo y de trabajo condiciones justas para los trabajadores. El trabajo es un concepto que refleja la necesidad de poner nuestro deseo, nuestra fuerza para transformar la Naturaleza y nuestra propia naturaleza. El trabajo realizado con condiciones y remuneración adecuadas no sólo es satisfactorio, sino que abre el camino para un estado de bienestar físico, mental y social. Porque sin trabajo no hay acceso a salud, educación o bienestar. 





Helena Trujillo 

Psicoanalista Grupo Cero 

















lunes, 5 de julio de 2010

Poema a la selección española de fútbol

POEMA A LA SELECCIÓN ESPAÑOLA DE FÚTBOL

No duerme nadie en España.
Caen los últimos granos de arena
que anuncian la hora señalada.
Nuestro ejército carmesí se encamina
por la verde alfombra a la batalla.
Altos muros de lengua germana
se levantan frente a la portería,
firmes y desafiantes clavan su mirada.
Los soldados de rojo,
de pies ágiles y alegría en las entrañas,
se hermanan por la conquista
del trofeo dorado,
cáliz con roja sangre de resurrección.
La historia no recuerda perdedores,
ni el más fiero ni el más fuerte
llenan sus páginas escritas.
No bastan intenciones
ni altas Torres inmóviles
frente a la portería.
Jugar mejor, driblar al contrario,
galopar por las bandas
y engañar con la mirada
mientras se acaricia el balón,
hacia la red, dentro del arco,
trazando una maraVillosa jugada.
Gol y victoria.
El verde se tiñe de rojo apasionado.
Suenan las vuvuzelas,
el negro continente se hace andaluz,
madrileño, gallego, catalán.
Los españoles queremos
hacer nuestro sueño realidad,
aprender a ganar,
ser lo que nunca fuimos,
campeones del mundo de fútbol,
reyes del balón.


Helena Trujillo